20/2/13

HACIENDO MEMORIA (1)
 Julia Rossignol

Recibimos la primera contribución a nuestra convocatoria del día 9 del corriente mes, memorias de una egresada promoción 1962. ¡Muchas gracias!

Recuerdos de la Escuela Normal
                          El Examen de Ingreso

Cuando pienso en la Escuela Normal los recuerdos fluyen, se entremezclan, se apilan, se confunden. Aparecen caras, tiempos y hechos, palabras y gestos, risas y lágrimas.
Una manera de recordar y testimoniar sería ordenando en el tiempo los episodios que vienen a mi mente, es decir, empezar por el principio….. y en este caso, el principio es antes, seis meses antes cuando nuestros padres decidían enviarnos a “prepararnos para el ingreso” Éramos, la mayoría, buenos alumnos, pero el examen de ingreso era una sombra y un peligro, qué hubiera pasado si no entrábamos? No había muchas posibilidades de pagar escuelas privadas, entonces, el futuro y el examen de ingreso eran una misma cosa.
En esa época había una manera infalible de aprobar el examen: ir a lo de Margarita Colomés. Vivía y daba clase en una vieja casona en la calle Zeballos con un pequeño jardín al costado y algo así como una pérgola al fondo.
Margarita no tenía edad, supongo que era una persona mayor, pero la estoy juzgando desde los once años que yo tenía en esa época. Íbamos a partir de julio, de lunes a viernes, dos horas cada tarde. Trabajábamos intensamente en clase y llevábamos tareas que se sumaban a las que correspondían a la escuela. Todos los días entre esas tareas había que hacer una composición acerca de distintos temas. Se hacía en papel con renglones de un block que comprábamos especialmente y que venia ranurado, de esa manera se entregaba diariamente la producción lograda. Me gustaba, porque ya me gustaba escribir, solía llegar temprano y les dictaba distintas versiones del mismo tema a compañeros desesperados que no habían encontrado letra para el tema de ese día.


    Trabajábamos con dos cuadernos forrados con papel azul araña. Debía tener la etiqueta en el ángulo superior derecho. Subrayábamos los títulos con azul y con regla cuidando el detalle. La raya azul no debía exceder demasiado a los costados y no estar ni muy separada, ni muy pegada al texto.
 Una vez en clase el clima era absolutamente silencioso, con un silencio pesado en el que se oía nuestra propia respiración.
La señorita Colomés se vestía de negro, con un vestido algo fruncido y nos gustaba adivinar si era siempre el mismo o tenía muchos vestidos iguales.
Recuerdo a un compañero, Roberto, excelente alumno y dibujante genial, pero zurdo. Margarita le gritaba, le pegada en la punta de los dedos, caramba, como se le ocurría a Roberto semejante irreverencia! Había un orden dado y nada se cuestionaba, tampoco nuestros padres hubieran permitido el comentario o la queja.
   El libro con el que estudiábamos era el “Manual de Ingreso” Matemáticas- Castellano para Colegios Nacionales. Liceos Nacionales de Señoritas y Escuelas Normales, Comerciales, Industriales, Técnicas y Profesionales de Editorial Escolar de la Provincia de Buenos Aires.
Hacíamos cada ejercicio, estudiábamos cada línea, resolvíamos, repetíamos y volvíamos a hacerlo.
Cuando llegó el día del Examen nuestros padres nos acompañaron y muchos de ellos se quedaron afuera, en la vereda, atrás de la reja, gran parte del día. Eran los padres que querían cumplir la ilusión del hijo, primera promoción familiar de secundario. ( y capaz que hasta llegaba a la Universidad!)
Era una Argentina con grandes sueños, y con grandes convicciones. El estudio era un valor aceptado socialmente y las familias apostaban a ello con sacrifico, con esfuerzo, porque también el esfuerzo y el trabajo eran valores sociales.
Muchas cosas cambiaron, pero por ahora nos quedamos en este tiempo.

La joven que se encuentra a la derecha con su mano sobre el respaldo del sillón es la renombrada Margarita Colomés (1927).

Foto: http://elquilmero.blogspot.com.ar/2012/07/curiosidades-del-normal-para-un.html

RECTIFICACIÓN
Así se va Haciendo Memoria
22/02/13

Susana Botindari Sólo un pequeño detalle, como para evitar cualquier error. Margarita Colomés, vivía y daba clases en una casa con zaguán y dos ventanas a la calle, con un jardín a la izquierda, ubicada en la calle Alem entre Belgrano y Pringles de Quilmes. No sé la altura exacta, la casa aún está y debe ser aproximadamente 525.

Julia Rossignol Gracias Susana, cuando releímos la nota, ya publicada, Horacio, mi esposo, comentó que no era Zeballos; nos fuimos de Quilmes hace treinta y dos años y algunas calles se me confundieron en la memoria.

Susana Botindari Julia, sentí algo de pudor en escribir una corrección, cuando vos te tomaste el trabajo (y yo no) de redactar un aporte a la página de Exanqui  Pero mi manía obsesiva por lo correcto, me traicionó. Gracias por tu contribución generosa. Beso.

Fuente: Intercambios en Facebook.
Ver también los Comentarios al pie de ésta.

10 comentarios:

  1. ACÁPITE. El 14 de mayo de 1927 la Escuela Nº 1 estrena vicedirectora, cargo que inaugura la señorita Margarita Colomé, nacida en 1895, soltera, con título de maestra normal egresada en 1912. Era directora desde el año anterior la señora Rosalía Davel de Deambrosi que desempeñaba el mismo cargo en la Escuela Nº 2 de Berazategui (hoy la Nº 4 que lleva su nombre) y sustituyó el 30 de marzo de 1926, a la señora América Gregorini que obtuvo su jubilación.
    Margarita Colomé ejercía en la provincia desde 1913. Ingresó a la Escuela Nº 1 el 11 de marzo de 1916, para tomar un 5º grado. En 1923 se hace cargo del 6º B grado del Curso Complementario junto a Teodolinda Míguenz de Ricafull a cargo de 6º A. Cuando asume como primera vicedirectora de la Escuela Nº 1 la sustituye en 6º “B” María Isabel Palavecino (n. 1898) uruguaya, una de las primeras egresadas del departamento de aplicación de la Escuela Normal de Quilmes y de la promoción de 1917 como maestra de esa misma institución.

    De: HISTORIA SOCIAL, EDILICIA E INSTITUCIONAL DE LA PRIMERA ESCUELA OFICIAL DEL PARTIDO DE QUILMES. LA ESCUELA PRIMARIA Nº 1 “BERNARDINO RIVADAVIA”

    Chalo Agnelli

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias, Chalo, por ampliar la información. Siempre podemos contar con tus eruditos aportes!!!

      Raquel

      Eliminar
    2. El articulo me trajo muchos recuerdos Solo queria aclarar, si me permitis, que el nombre era Margarita Colomés. Era mi tía y recuerdo haber ido muchas veces de chica a su casa mientras tenía alumnos y la descripcion que haces de como daba clase es exacta. Gracias por el recuerdo La direccion si no recuerdo mal era la que menciona Susana. Mi nombre es Ana Colomés

      Eliminar
  2. Muchas gracias, Ana, por ayudarnos con tu oportuna rectificación. Cualquier información que desees añadir respecto de esta recordada maestra, será publicada para enriquecer nuestra pequeña historia.

    Cordialmente
    Raquel Gail
    Coordinadora (ad-honorem)
    Archivo Histórico
    Escuela Normal de Quilmes

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Queridísima Ana, soy Maruja, recuerdas cuando jugábamos a la maestra con tu hermana Delia..??Quisiera poder ponerme en contacto contigo. Besos

      Eliminar
  3. Raquel, soy ex-alumno del Nacional de Quilmes, que funcionaba por la tarde en el mismo edificio que la Escuela Normal. Hice el curso de apoyo al ingreso con la Señorita Colomés en 1959. Tu descripción de aquellas clases no puede ser más exacta, hasta el detalle de los subrayados de colores y los cuadernos forrados en papel araña. Creo que llegué a completar más de 10 cuadernos de ejercicios a lo largo del curso. Por su severidad, Margarita nos inspiraba un temor reverencial. El ambiente de la casa era entre monástico y militar. Pero sin duda era eficaz. Recuerdo que saqué el tercer puntaje en el examen de ingreso. Los dos primeros puntajes los sacaron dos tipos brillantes que fueron mis compañeros en "la tercera" hasta quinto año, a quienes nunca volví a ver. Gracias por el recuerdo!

    ResponderEliminar
  4. La señorita nos crio a mi y a mi hermana, por eso al leer todos esos recuerdos me puse a llorar como loca, me crio desde que naci,y la direccion correcta es Leandro N. Alen 527, una enorme casa y alumnos por todos lados y desde primaria hasta alumnos de la facultad ella era una eminencia

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Maruja, el nombre de tu hermana creo que es Isabel, mi nombre es Eduardo Piedras, Margarita Colomés me ayudaba a preparar materias que me había llevado a examen en el verano de 1962 y durante 1964, vos eras más pequeña que yo, tu hermana era de mi edad, todavía me veo con algunos «muchachos» que estudiábamos allí, tengo muchas muchas anécdotas y buenos recuerdos. La Señorita como la llamábamos era muy buena persona, de un corazón muy grande, siempre la recuerdo. A vos la última vez que te vi trabajabas de cajera en el Supermercado de Llaneza que cambio muchas veces de nombre en la esquina de Rivadavia y San Martín en Quilmes

      Eliminar
    2. Gracias por añadir tu recuerdo Eduardo Piedras.

      Eliminar
  5. Estimada María: agradezco mucho sus comentarios pero, si la misma Ana Colomés no ve esta nota, nada puedo hacer por ayudarla. Los mensajes que llegan al Blog no tienen remitente para contestar. También a mí me gustaría contactar a alguien de la familia para ampliar información.

    Cordiales saludos
    Raquel Gail
    Coordinadora (ad-honorem)
    Archivo Histórico
    Escuela Normal de Quilmes

    ResponderEliminar